Las Maquilas, una zona de esclavitud
Die Spanischgruppe der 7BCR hat sich im Rahmen des diesjährigen ÖKOLOG Projektes mit den Arbeitsbedingungen der NäherInnen in den sogenannten Maquilas in Mittelamerika beschäftigt.
Als Maquila oder Maquiladora werden Betriebe bezeichnet, die in zollfreien Produktionszonen arbeiten und durch die NAFTA-Freihandelszone besonders stark wuchsen. Dabei kommen die Rohstoffe oder Einzelteile aus demselben Land (USA), in das sie anschließend als fertige Waren zurückgehen.
In den Maquila-Fabriken gibt es kaum Arbeiterrechte und keine Gewerkschaften. Die Beschäftigten – überwiegend junge Mädchen – arbeiten bei geringer Bezahlung oft unter unmenschlichen und gesundheitsgefährdenden Bedingungen.
Las Maquilas es una zona de libre comercio construida en México y Centroamérica. Allí las plantas tienen mucho éxito porque los estadounidenses, por ejemplo, suelen comprar ropa cada vez más barata. Pero a la hora de comprar esa ropa a precios tan bajos todos deberíamos pensar en las condiciones de los trabajadores de estas fábricas textiles.
› Prefieren a chicas de aproximadamente 16 años. Según los propietarios de las fábricas la razón es que a esa edad la coordinación entre los ojos y las manos es perfecta, pero en verdad también las eligen porque son indefensas y dóciles.
› No les permiten a las trabajadoras ni ir al baño ni beber agua cuando quieren.
› Reciben pastillas para que no queden embrazadas. Si hay trabajadoras embrazadas les dan inyecciones para que aborten al niño.
› Si no han terminado su cuota tienen que cumplir la meta el fin de semana.
› Les pagan muy poco dinero. Sólo reciben un 5 por ciento de los sueldos que reciberían si trabajaran en los Estados Unidos.
No quieren pagarles el dinero que merecerían aunque ni siquiera pagan impuestos ni aranceles. Lamentablemente, no hay seguridad social ni seguridad de salud para las que tienen que trabajar en Las Maquilas.
Además cada fábrica tiene un grupo de protección parecido a una policía propia para que nadie pueda investigar contra los propietarios o ayudar a los trabajadores.
¡Qué atrocidad!